dissabte, 13 de novembre del 2010

Arrival training: Stayokey Arnhem

Después de pasar la primera difícil semana, el sábado partí hacia Arnhem para el primer Arrival training. La verdad que no tenía demasiadas ganas de estar 5 días aguantando aburridas charlas de motivación, objetivos y metas, trabajo en equipo, etc. Cuando llegué me encontré en un lugar con 25 voluntarios de diferentes nacionalidades, hasta un total de 15, que sólo hablaban inglés, como es normal. Predominaban los franceses, con 5 voluntarios en ese training. Ese training me lo tomé como un curso avanzado de inglés, pero los primeros dos días también fueron difíciles. Tenía que estar la mayor parte del tiempo concentrado para poder entender algo de las conversaciones, explicaciones de las clases y demás, al principio no me gustó, luego, dejé atrás la vergüenza y empecé a decir cosas, una vez ya comprobé, que quizás yo no era el único al que le costaba hablar en inglés, aunque sí era el que peor hablaba.
Esos 5 días creo que lo importante es conocer a gente de diversas nacionalidades, personalidades, gustos, y eso es algo que valoro enormemente. El ambiente fue formidable, juegos, risas, fumadas, borraxeras, actividades, y en definitiva, divertido. Poco a poco me dí cuenta que esos campamentos se hacen para que exista un comienzo de interacción con gente de otros países y por esta razón al final te diviertes. Al final, esos 5 días son como estar en un pequeño gran hermano en el que convives durante 24 horas con las mismas personas. También me sorprendió el hecho de tener como compañero a un chico ciego, de Letonia, que está haciendo un programa en el norte de Holanda. Me sorprendió su valentía, inteligencia, fuerza de voluntad, destreza y simpatía. ¡Se liaba hasta los cigarros con una maquinita a la perfección!. Gran persona, aprendí mucho de él. Incluso me impresionó el último día que nos invitaron a cenar a un Wok de buffet libre y barra libre, y Arthurs, el chico ciego, se quedó hasta el final de la fiesta, volviéndo con los últimos a pie de noche y caminando durante 45 minutos hasta el albergue apoyada la mano para guiarse en personas de estaban muy borrachas después de toda la noche bebiendo.
Por otra parte, me gustó mucho visitar aquella ciudad histórica, Arhnem, donde se libró una batalla de la II Guerra Mundial, cuando el ejército nazi, tomó el puente de Arhnem para tener el control del Rhin y poder adentrarse hacia la capital Amsterdam para más tarde poder acceder a los países Escandinavos con mayor facilidad. Visité el Airborne Museum que cuenta la historia de la legendaria batalla, de la destrucción de la ciudad y de como el ejército nazi ganó la batalla al batallón de paracaidistas y otros regimientos que las tropas aliadas enviaron a la ciudad. Es impactante ver como quedó el puente de Arhenm y la ciudad y ver como está ahora. También visité el cementerio en el que están enterrados algunos de los que murieron en la Gran Guerra, llamándome la atención como en las tumbas de los judíos se colocan 5 piedras formando una línea recta. La verdad que no sé que significa.

Volviendo a los compañeros, cuando pasaron los 5 días tuve la sensación que me gustaría hacer el EVS en ese hostal con esa gente que conocí, hablando cada día en inglés, así si que 6 meses hablo seguro. Ahora me da pereza volver al proyecto, a Amstelveen, a Amsterdam, pero sólo lo pienso por un instante, en frío sé que Amsterdam es la caña y es lo que necesito ahora para tratar de enterrar definitivamente ciertos sentimientos y pensa-mientos que aún perduran y que no me dejan ser como yo como quiero ser.